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La EpistemologĆ­a del sur  es la bĆŗsqueda del conocimiento y criterios de validez del conocimiento que otorguen visibilidad y credibilidad  a las prĆ”cticas cognitivas  de las clases,  de los pueblos y de los grupos sociales que han sido histĆ³ricamente victimizados, explotados y oprimidos, por el colonialismo y el capitalismo globales.

 

Boaventura de Sousa Santos 

Es la otra EpistemologĆ­a que busca el otro conocimiento desde abajo y a la izquierda. 

 

MAEM

 

ā€‹ā€‹ā€‹Aun cuando los polĆ­ticos se llenan la boca cuando hablan de la educaciĆ³n de los mexicanos, el Sistema Educativo Nacional no existe como tal. Los paĆ­ses pobres, MĆ©xico, a pesar de sus riquezas naturales es un paĆ­s pobre, pues ha sido y sigue siendo saqueado. Los paĆ­ses como MĆ©xico no tienen autonomĆ­a en el Ć”mbito socioeducativo. El plan nacional de educaciĆ³n obedece no a las necesidades educativas de los mexicanos sino a las exigencias del gran capital planteadas a travĆ©s de los organismos internacionales como la organizaciĆ³n para la cooperaciĆ³n (OCDE) y desarrollo econĆ³mico, el banco mundial (BM) y el fondo monetario internacional. (FMI)

 

Los sistemas educativos actuales contribuyen a la reproducciĆ³n de la sociedad capitalista: preparando la mano de obra necesaria para la producciĆ³n primaria e industrial, legitimando las relaciones capitalistas de producciĆ³n y contribuyendo asĆ­ a perpetuarlas, enajenando a amplios sectores poblacionales que ven en la educaciĆ³n un instrumento de movilidad social, justificando el desempleo para aquellos que no han tenido acceso a la educaciĆ³n y formando consumidores potenciales.
La educaciĆ³n que se oferta a las generaciones jĆ³venes, a travĆ©s del aparato escolar, ha servido a las clases dominantes como un instrumento importante para mantener su dominaciĆ³n. La escuela moderna estĆ” instituida sobre la base de una estructura vertical, en la cual la autoridad juega un papel, muy importante, la lĆ­nea es: supervisor, director, maestros y alumnos, ocupando estos Ćŗltimos el nivel mĆ”s bajo de la escala, es decir en donde se sostiene la autoridad. Esta escuela autoritaria, a lo mĆ”s que ha llegado es reproducir un conjunto de contenidos que en el mayor de los casos resultan inĆŗtiles para la vida cotidiana. Las reformas realizadas a la educaciĆ³n en los Ćŗltimos aƱos, restringen cada vez mĆ”s la tarea de la acciĆ³n educativa; asimismo las ā€œevaluacionesā€ estĆ”n orientadas a identificar

la precisiĆ³n con la que los estudiantes han incorporado los contenidos. Hoy los recursos que reciben las escuelas son asignados en funciĆ³n de los resultados de los exĆ”menes, es decir, en funciĆ³n de los procesos reproductivos. AsĆ­ el nivel de calidad es identificado con las destrezas para contestar exĆ”menes. Consignado esta parafernalia como educaciĆ³n de calidad.

La educaciĆ³n debiera proporcionar a las generaciones jĆ³venes las herramientas, para el desarrollo humano, es decir potenciar al mĆ”ximo cada una de sus capacidades. Prepararlo para la justicia, la democracia, la productividad, la objetivaciĆ³n, la fraternidad, la solidaridad, afectividad, etc. Sin embargo, la escuela encargada de dar educaciĆ³n restringe la libertad y limita la creatividad, justicia y democracia. La educaciĆ³n lejos de ser un bien, se convierte en una forma de alienaciĆ³n y de tortura. ViolentĆ”ndose de esta forma los derechos mĆ”s elementales y orientando a la deshumanizaciĆ³n.

Los temas de educaciĆ³n libertaria y comunalidad forman parte
del debate actual sobre la educaciĆ³n en el magisterio de Oaxaca,
a pesar de ser contenidos que parecen no tener mucha relaciĆ³n,
en el contexto de la lucha magisterial oaxaqueƱa, se encuentran
Ć­ntimamente ligados. La educaciĆ³n libertaria en el caso de los
pueblos originarios de Oaxaca tiene que ser comunal.

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